Ghost Rider:
Johnny Blaze es parte de una familia circense. Su padre adoptivo hace acrobacias en motocicleta hasta que enferma. Johnny, entonces, hace un pacto con Mephisto para salvar su vida. Lo que Johnny no sabe es que la familia de su madre, el clan Kale, está maldito, ya que Mephisto había atado al demonio Zarathos a su linaje. Así que, en vez de tomar el alma de Johnny, la une con Zarathos para convertirlo en un sirviente del infierno. Pero Johnny logra enfocar la ira del demonio para buscar retribución y se convierte en el Ghost Rider, un espíritu de la venganza.
Venom:
Eddie Brock era un periodista que pasaba por una mala época con su editor, J. J. Jameson. Brock decide resarcirse y seguir el caso de un asesino serial, en el que señala a un sospechoso como culpable. Pero, como Spider-Man desenmascara al verdadero responsable, Brock es despedido y repudiado por los otros medios. Mientras medita sobre la posibilidad de suicidarse en una iglesia, es alcanzado por el simbionte parásito que Spider-Man expulsó de su cuerpo, y entre ambos suman sus respectivos desprecios por el arácnido para convertirse en Venom, un villano y, posteriormente, un antihéroe.
Punisher:
Frank Castle era un marine y veterano de Vietnam que perdió a su familia cuando unos miembros de la mafia iniciaron un tiroteo en una plaza. Cegado por la ira y sus deseos de venganza, Castle abandona su hogar, se suple con un arsenal inimaginable e inicia una cruzada personal de castigo como el vigilante Punisher. En ella, cada criminal, maleante o miembro de la mafia con el que se encuentre será asesinado de manera inmediata e impiadosa, a fin de que no tengan oportunidad de manipular a ningún jurado o sobornar a ningún juez para ser liberados.
Wolverine:
James Howlett es un mutante que nació a fines del siglo XVII y vivió una turbulenta vida que le enseñó la maldad y crueldad de la que puede ser capaz el ser humano. Ya adulto, se convirtió en soldado y participó en varias guerras gracias a su poder regenerativo, que aletargaba su envejecimiento. En un momento indeterminado del siglo XX, es sometido a un experimento en el que se fusiona su esqueleto con el metal indestructible adamantium y se borra su mente, lo que lo convierte en uno de los hombres más peligrosos y salvajes del mundo.
Deadpool:
Wade Wilson era un soldado y experto combatiente que, tras cumplir su tiempo en el ejército, se convierte en un mercenario a fin de aprovechar sus habilidades. Después de ser diagnosticado de cáncer terminal, Wade abandona su tratamiento, a su novia y se une al proyecto Weapon X de armas vivientes en Canadá, con la idea de curarse. Los científicos de Weapon X logran darle una versión sintética y aumentada del factor curativo de Wolverine que cura su cáncer, pero el proceso deja su cuerpo completamente desfigurado y su mente completamente alterada.
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